Pequeñas crónicas del Sur. Mapuches VS Los señores del gran Capital. (3º Entrega)

04/01/11

Dia 2. Junin de los Andes. Ciudad de poco brillo, uno al pisarla sabe que los agentes del capital todavía no le metieron mano. Es autóctona, conserva su plazita y sus calles de tierra, hay un cajero. un link. Cruzando la calle, en frente, unos jardineros inquietos podan algunas flores, mientras los lugareños sentados en los banquitos te miran. nos miran. saben que venimos de paso. ni se mosquean en saludar. me parece perfecto.

En la terminal, el movimiento es intenso. todos los backpackers delinean las rutas a seguir. nosotros también. El bondi, un Castelli. nos llevará hacia rutas salvajes.    

Camping Bahia Cañicul. la brisa de la mañana se confunde con el torrente que baja de los cerros. tanta poesia   abruma. Segun comentan, algunos campings, éste, en particular, fué cedido a los dueños originarios de las tierras, Ergo. los mapuches, para que lo regenten. Fabulosa idea. y bien que lo hacen. serán unas diez o quince personas. La patrona (siempre detras de la cocina) un casero y varios chicos que se ocupan de darle de comer a los animales, cortar el pasto, juntar leña y tener todo mas o menos en condiciones.

Diviso nieve en las cumbres de los cerros. postal inmejorable. el mas cercano recuerdo que se aloja en mi memoria viene pegado a las publicidades de los chocolates Milka, en donde las cabañas y los cerros con picos blancos y verdes praderas desentonaban con la vaca color purpura, acá en Junin el que desentona soy yo con mi remera yanqui de los "Bastogne".  

 19:26 hs

Tomando mates a la vera del Lago Cañicul. It´s too fucken unplugged. no hay señal de celular, no hay Wi Fi, la luz eléctrica aparece a partir de las 19 hs. demasiadas privaciones para un pibe que se creé mochilero siendo que le asoman unas branquias de google por todos lados ¡¡¡

Los lugareños (Mapuches) son simpáticos, aunque si hilamos fino, los que no son mapuches también son copados, pero se ve que escribir que los mapuches son tal cosa, es mas divertido que decir que un porteño o un tucumano son buenos tipos, como que resulta muy trillado ¿no?. El tema es que realmente lo son porque fíjense en esta particularidad que les voy a narrar a continuación y verán que esta asociada a su hospitalidad.
díganme en que lugar del mundo uno, al pedir agua para el mate te pregunten: -¿hirviendo o para mate?- Bárbaro ¡¡¡ así tendría que ser en todos lados, acabaríamos con el flagelo de las ampollas.    

Van 2 días de lluvia, es copiosa, de esas que molestan porque mojan de a poco, como cuando salís a dar una vueltita a la proveduria y volves, te das cuanta que tus zapas están todas mojadas, y ni hablar de las medias.

El tiempo es raro por estos lares, pasas del frió al calor en nano-segundos. Ni me quiero imaginar a los adolescentes que pactan citas para encontrarse en un barcito, lo complejo que debe de ser. Porque no es que  hace frió o calor como en un lugar normal, a decir: Rosario, sino que es ambos, frió y calor juntos. Digamos que el tiempo se maneja como el INDEC, se dibuja y se desdibuja a cada rato. Miro al cielo y veo como las nubes empiezan a moverse de tal forma que terminan tan retorcidas como los espirales de mosquitos, algunas blanquitas (esas son lindas) otras un poquito mas oscuritas, esas no son de mi agrado en absoluto, porque son las que traen consigo esa lluvia que nos persigue a cada rato, como en los dibujitos de la Pantera Rosa.